Otro año más tuve el placer de participar en la Feria del Libro de Madrid 2015, con la firma que organizó mi editorial en la caseta de UDL-Libros. Así que sirva este post como pequeño album recopilatorio de los buenos momentos de lo que allí ocurrió.

Había ambiente optimista entre los libreros. Dicen las estadísticas que se ha vendido un 6,1% más que en 2014, y se hilan 3 años seguidos de crecimiento. Sant Jordi ya anunciaba buenas perspectivas con un crecimiento del 4%. Así que todo el mundo estaba contento a pesar de que siguen siendo momentos duros para el sector cultural de nuestro país.

También me he llevado la impresión de que este año no ha habido estridencias literarias y “belenesesteban”. Los grandes protagonistas han sido clásicos como Pérez-Reverte o la flamante nueva alcaldesa Carmena. Me hubiese encantado conocer a Joël Dicker, porque su última novela “La verdad sobre el caso Harry Quebert” es de lo mejor que he leído en años.

Queda claro que la cocina sigue teniendo mucho tirón en este país: los cocineros y en especial los televisivos, tienen un impresionante tirón entre el público. El ensayo político y económico de actualidad también está de moda: la gente sigue queriendo entender qué pasa e intuir qué va a pasar. Me sorprendió el joven Blue Jeans, con una  interminable cola de jovencitas dispuestas a devorar su última novela “Algo tan sencillo como tuitear te quiero”. Para mi era un desconocido, pero claro, no soy su target…

Me hizo mucha ilusión conocer a Santiago Niño-Becerra, que me dedicó su último ensayo titulado simplemente “La economía”, su particular visión de la historia económica construida a partir de citas comentadas de grandes pensadores.

El momento más emotivo fue el reencuentro con Leopoldo Abadía y su hijo Gonzalo. Nos conocimos en la Feria del Libro de Madrid 2012 en mi estreno como autor y nos reencontramos 3 años después en el mismo sitio. Leopoldo es de los tipos más simpáticos que conozco, un grandísimo profesional y encima, sus libros son buenos! Un fenómeno!

Eso fue todo,… más o menos… ¡El año que viene más!